Una última confesión melancólica. No he tenido tiempo de ejercer la literatura. Pero he dedicado todas las horas posibles para amarla/Juan José Arreola
Hay historias que no se olvidan, historias que el tiempo no puede llevarse, están escritas en la pared, en el corazón. Es inútil pintar mil colores no borra su memoria. Ella bien lo sabe, no es que con el tiempo duela menos, es que uno se acostumbra a vivir con el dolor Irma Pineda/poeta zapoteca